Una mujer estadounidense murió en el acto tras ser atacada por un tiburón toro y sufrir heridas en la parte superior del cuerpo. La trágica escena ocurrió en Green Cay, Bahamas.
La víctima, de la cual no se conoce aún su identidad y solo se pudo saber que era de Pennsylvania, Estados Unidos, se encontraba de vacaciones en una excursión en crucero junto a su marido y sus dos hijos.
El ataque ocurrió en una zona que es muy concurrida por los turistas para realizar snorkel y la empresa de cruceros en la que estaban había planeado la actividad.
Según detalló la Policía local, la familia “se encontraba haciendo snorkel en aguas que son conocidas por ser predilectas para dicha actividad”, mientras que también revelaron: “Los miembros de la familia de la víctima estaban presentes al momento del ataque y debieron observarlo”.
Pese al miedo que pueden generar los ataques de tiburones, estos son menos frecuentes de lo que se imagina y pocos casos terminan de forma trágica. Por ejemplo, en 2021 hubo 73 en todo el mundo y solo nueve de ellos terminaron de forma fatal.
El tiburón toro
Esta especie puede llegar a medir hasta 3,4 metros de largo. Pese a no tener reputación de devorador de hombres como sí ocurre con el tiburón blanco, suele ser la responsable de la mayoría de los ataques por su capacidad para ingresar a ríos y aguas poco profundas, donde suelen nadar las personas.
También se lo conoce como tiburón sarda, tiburón lamia y tiburón del Zambezé, y se lo puede encontrar en el Río Amazonas hasta Perú, en África, en India y hasta en Australia, entre otros puntos geográficos.