Junto con la llegada del frío, también comienza a regir un nuevo aumento en la tarifa del servicio de gas, y por esa razón resulta sumamente importante en este momento que todo usuario del servicio pueda contar con información adecuada para entender en detalle la factura del servicio y los conceptos facturados, el consumo de los artefactos instalados en el hogar y consejos prácticos al momento de usarlos.
Conocer cómo se compone una factura, cuáles son los conceptos facturados, los cuadros tarifarios vigentes y las formas más eficientes para hacer uso de la energía, permiten ser conscientes al usarla para que impacte positivamente tanto en la reducción de la factura, como en el cuidado del gas, un recurso no renovable.
Categoría de usuario
Para entender la factura de gas es necesario primero comprender que los usuarios residenciales se clasifican en ocho categorías: R1, R21, R22, R23, R31, R32, R33, R34. Estas categorías agrupan a usuarios con similares volúmenes de consumo. Son variables, y se definen en cada periodo de facturación.
Una variación de consumo, en el último año móvil, puede llevar a una variación de categoría. De esta manera, los usuarios que menos gas consumen tienen aplicada una tarifa más económica.
Registro de acceso a los subsidios
A partir del 2022, se dispuso un régimen de segmentación de subsidios para usuarios residenciales, que los divide en tres, de acuerdo a los ingresos por hogar, medidos en canastas básicas totales (CBT).
– Usuarios del servicio de ingresos altos (N1): 3.5 o más CBT
– Usuarios del servicio de ingresos bajos (N2): menos de una canasta básica total
– Usuarios del servicio de ingresos medios (N3) entre 1 y 3,5 CB
De acuerdo al segmento en el que esté inscripto el usuario, percibirá o no distintos subsidios sobre el precio de gas en boca de pozo, incorporado en los cuadros tarifarios vigentes.
Los usuarios pueden conocer los criterios de esta segmentación, completar o modificar su registro ingresando en: Segmentación energética: subsidios a la luz y el gas | Argentina.gob.ar.
Sub-zonas y conformación de cuadro tarifario
Para la construcción final del cuadro tarifario, hay que tener en cuenta una tercera variable: la sub-zona tarifaria, que representa valores tarifarios y umbrales de determinación de usuarios completamente diferentes dependiendo la localidad de residencia.
Del cruce de estas tres variables (categoría de consumo, segmentación –RASE– y Sub-zona tarifaria) se determina el cuadro tarifario en el que se basan las facturas, que puede conocerse ingresando a: Tarifas Vigentes | Camuzzi Gas
Beneficios, subsidios y tarifas especiales
Adicionalmente a lo expuesto, existen categorías especiales de usuarios, que contempla distintos subsidios, como la Tarifa Social y la Tarifa a Entidades de Bien Público. Asimismo, el beneficio “Zona Fría” se amplió a partir de 2021 a los hogares de las localidades y provincias argentinas de acuerdo con sus propias condiciones climáticas, independientemente de los ingresos y consumo de los usuarios.
Los hogares alcanzados por este beneficio obtienen una bonificación del 30% en la tarifa, porcentaje que se eleva al 50% en el caso de aquellos usuarios con tarifa social o con residencia en la Región Patagónica, Departamento de Malargüe (Mendoza) y Región de la “Puna”.
Bahía y la región siguen siendo «Zona Fría»
A partir del dictamen de la Ley de Bases aprobado en la Cámara de Senadores de la Nación, Bahía Blanca y todo el Sudoeste Bonaerense continuarán gozando del beneficio de ser considerada «Zona Fría», ya que fue una de las modificaciones que incluyeron los senadores en el texto que obtuvo media sanción en Diputados.
Conceptos que se facturan bimestralmente.
La factura que emite y entrega Camuzzi a sus usuarios retribuye no solo la labor de la distribuidora sino a todos los actores involucrados en la cadena energética: la factura está compuesta por el precio del gas, que remunera al productor de hidrocarburos por extraer la energía en los yacimientos; el transporte, que remunera a la empresa transportista por el servicio de llevar el gas desde el yacimiento hasta los centros de consumo, la distribución, que remunera a las distribuidoras, en el caso de Camuzzi por el servicio de llevar el gas desde el punto de entrega de la transportista hasta cada uno de los medidores de los usuarios; y por el último, los impuestos del Estado nacional, provincial o municipal, según corresponda.
En resumen, más allá de los impuestos, los usuarios podrán encontrar entonces detalle de los conceptos facturados: un cargo fijo específico para cada categoría, y un cargo variable (el propio consumo), determinado por multiplicar la cantidad de metros cúbicos consumidos, por el valor que dicho m3 tiene para ese usuario.
Consumo de los artefactos
Cada artefacto tiene un consumo distinto. Por ejemplo, una estufa chica de 2.500 kcal/h, la más habitual en las habitaciones, prendida durante 8 horas diarias, consume en un bimestre casi 134m3.
Una hornalla de la cocina, prendida 4 horas por día, consume al finalizar el bimestre aprox. 40m3.
Un calefón, calculado para una casa de dos personas, consume aproximadamente 67.80m3.
Conocer el gasto de los artefactos permite evaluar su uso, y medidas de ahorro en caso que se requiera reducir el consumo. Camuzzi puso a disposición de sus usuarios un “Simulador de Consumo” por artefacto que permite realizar el ejercicio de manera sencilla para obtener un aproximado: Simulador de Consumo | Camuzzi Gas
Consejos para ahorrar gas
Para calefaccionar el hogar, la compañía recomienda tener en cuenta los siguientes tips:
– Regular el termostato a una temperatura ambiente de 20°C en invierno.
– Calefaccionar solo aquellos ambientes donde haya gente. En espacios grandes, cerrar accesos y puertas a otras habitaciones para concentrar el calor en un único espacio más chico.
– No abrir ventanas para bajar la temperatura de un ambiente. Es mejor hacerlo desde el mismo artefacto.
– Utilizar burletes para que no se pierda el calor por las puertas y ventanas.
– Tener en cuenta que los pilotos automáticos representan aproximadamente el 10% del consumo del hogar.
Asimismo, si se utiliza agua caliente se sugiere:
– Usar conscientemente el agua caliente de la canilla.
– Ducharse en un tiempo razonable.
– Regular el agua caliente desde el artefacto para evitar mezclarla con agua fría.
– Usar aireadores y reguladores de caudal.
En caso de utilizar el gas para cocinar es importante:
– Usar el horno con moderación, ya que consume lo mismo que tres hornallas.
– Tapar siempre la olla para concentrar el calor.
– Apagar o reducir la llama de la hornalla cuando la cocción llegue al punto de hervor.
– No permitir que la llama de la hornalla supere el diámetro del recipiente de cocción.
– Evitar abrir la puerta del horno durante la cocción, ya que hará que pierda mucho del calor alcanzado.
– Chequear y cambiar los burletes de la tapa del horno si fuera necesario.
– Recordar que las hornallas y el horno no son para calefaccionar el hogar, dado que no es eficiente, pero principalmente porque es muy peligroso.