Finalizó el juicio por el crimen de Fernando Báez Sosa luego de 13 audiencias por las que prestaron testimonio cientos de testigos y hasta cinco de los ocho rugbiers declararon.
Luego de una audiencia movida, donde dieron su parte médicos forenses solicitados por la defensa, también se escuchó la declaración de dos de los acusados, Blas Cinalli y Lucas Pertossi, quienes señalaron que no le pegaron a Fernando y que nunca tuvieron la intención de matar a alguien.
Cuando los jueces confirmaron el cierre del juicio se dio a conocer la fecha de alegatos. El miércoles 25 de enero será el turno de la Fiscalía y la Querella, mientras que al día siguiente, jueves 26 de enero, estará a cargo de la defensa.
A la salida del Tribunal los gritos de personas que fueron a apoyar a la familia Báez Sosa, invadieron la calle Belgrano en Dolores. Luego los papás de Fernando agradecieron la llegada y el cariño que recibieron.
Aun así se vivieron momentos de tensión cuando los padres de los rugbiers salieron por la puerta principal y fueron sorprendidos por una multitud que les gritaba en contra de sus hijos.
La situación generó disturbios en los alrededores ya que la Policía custodiaba a los padres de los acusados motivo por el cual se vieron botellas volar y agresiones.
Este cierre de juicio estuvo envuelto también en el tercer aniversario del crimen de Fernando motivo por el cual los papás de la víctima estuvieron muy conmovidos, sobre todo por la llegada de decenas de personas de diversos puntos del país y de Paraguay para apoyarlos.
Sumado a este recuerdo latente, este miércoles a las 19.00 se realiza en el anfiteatro de Dolores una ceremonia interreligiosa y el recibimiento de donaciones para dar a distintas entidades.
Con la conclusión de la ronda de testimonios, Radio 10 Bahía Blanca dialogó con el reconocido abogado Mauricio D’Alessandro sobre el procesos judicial que mantiene en vilo a todo el país.
«Tengo la sensación que la suerte está echada para los rugbiers», sostuvo el mediático, al tiempo que añadió las declaraciones de los imputados son un intento de engañar a los integrantes del tribunal para que cambiaran su opinión sobre la mecánica de la muerte. «Los ocho van a terminar diciendo que no fueron, es lo que dicen todos los imputados».
El reconocido abogado destacó que Guarino y Colazo declararon, sin embargo, no dieron testimonio de lo que se ve en el vídeo. «Hay elementos que son casi irrefutables, Thomsen le dijo a Fernando adentro del boliche que lo iba a matar».
Por otro lado, se refirió a los jueces que tendrán que decidir la condena: «No se dejan influenciar por los comentarios, por la opinión pública. Este es el fallo que queda como final de la situación, por eso son más cuidadosos para no dejarse influenciar».
«De que murió sería importante para saber si fue la patada de Thomsen, si fueron las 10 patadas o una piña. Muchas veces no se sabe de qué murió una persona, no es definitorio».
«Yo no quiero venganza. Una sanción ejemplar que cumpla con la ley. Creo que hay varias condenas ya listas, creo que algunas perpetuas», cerró D’Alessandro.