La Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) estableció el régimen de reintegros del 10% para consumidores finales que realicen compras en carnicerías con tarjeta de débito, prepagas o similares asociadas a cuentas abiertas en entidades financieras o fintech.
La medida entrará en vigencia el 1° de marzo, hasta el 31 de diciembre de este año, e incluye un diferimiento por 90 días en el pago de obligaciones impositivas a los comercios enmarcados en esta actividad.
El beneficio instrumentado a partir de la Resolución General 5330 publicada en el Boletín Oficial consiste en un reintegro del 10% del monto de la operación realizada en establecimientos dedicados a la comercialización de carne vacuna, con un tope de devolución de hasta $2.000 mensuales.
Estará vigente para las transacciones mediante terminales de pago como por medio de códigos QR. Por otro lado, el Banco Nación instrumentará para sábados y domingos un reintegro de $3.000 por compra.
Pese al plan del Gobierno, desde el sector agropecuario desestiman la medida y piden medidas acordes a la crisis de los productores.
El titular de la Asociación de Ganaderos y Agricultores de Bahía Blanca y consejero del IPCVA, Jorge Grimberg, habló en Posturas por Radio 10.
«Pasa lo que se venía hablando hace varios meses. Desde las entidades agropecuarias venimos hablando de que el precio de la carne viene planchada. El productor vende al kilo vivo, de ahí en más, todas las etapas van pasando por el frigorífico, la faena, hay distintos puntos de venta».
Grimber aseguró que los aumentos bruscos de precios bruscos no sirven para nadie. «Debe haber una estabilidad y una suba normal, racional. El gobierno aumento la oferta por la sequía y el precio de la carne se maneja por oferta y demanda. No hay una sola persona que maneje esto».
El titular de la Asociación de Ganaderos y Agricultores de Bahía Blanca y consejero del IPCVA detalló que el gobierno determinó siete cortes que no se pueden exportar y vuelvan al mercado interno. «No todos acceden a esos cortes. El problema es muy simple, fueron ocho meses planchados y una baja demanda por la sequía en el norte».
«El valor de la invernada, que es el elemento que entra al corral para ser engordado, por la situación que vivimos, también está muy alto. Hay muchos productores que se han fundido trabajando, porque te agarra un golpe como este. No ha habido ayuda real para los productores», comento. Y agregó: «El productor puede especular si tiene pasto. Puede aguantar un poquito más, pero es limitado».
También, se refirió a la exportación a China: «Gracias a Dios hoy existe la exportación a China y se lleva toda la vaca flaca que nosotros no podemos vender. Hay que aumentar la relación vaca-ternero porque vamos a tener una mayor oferta de carne para exportar y para consumo interno».
Para cerrar, analizó lo que puede pasar: «Estimo que se va a estabilizar siempre y cuando haya oferta razonable».















