En un reporte dado a conocer por fuentes oficiales, se hizo saber del resultado de estudios firmados por el Ministerio de Salud provincial y el SENASA donde se da cuenta del hallazgo de una situación comprobada de «influenza aviar» en la Zona Sur de Villarino.
En un comunicado emanado desde la Secretaría de Salud del Municipio de Villarino se informo que «en las últimas horas, se recibió una notificación desde el Ministerio de Salud de la Provincia de Buenos Aires que conjuntamente con SENASA dieron cuenta de la presencia de un caso positivo de gripe aviar en la zona circundante a la Laguna La Salada.
Desde ese momento se han puesto en alerta el Municipio de Villarino con los equipos de salud para identificar y realizar el seguimiento de las personas que han estado en contacto con las aves en cuestión.
Se recuerda que la gripe aviar llega a países de Latinoamérica por la migración de aves silvestres provenientes del norte del continente.
La influenza aviar es una enfermedad viral que afecta tanto a las aves silvestres como de corral, aves de producción de carne y huevos (granjas) y aves de traspatio, que son las que una familia puede tener en su casa, como gallinas, patos, pavos, gansos.
Las aves adquieren la enfermedad por contacto directo con otras aves enfermas, sus heces, plumas o elementos contaminados (por ejemplo: cama de galpón, ropa o calzado de personas en contacto, vehículo de traslado, etcétera).
Ocasionalmente, (aunque esto es poco frecuente) las personas en contacto con aves enfermas, también pueden contraer la enfermedad. La vía principal de la infección humana es por contacto directo con aves infectadas o con superficies y objetos contaminados por sus heces.
En general, los casos en humanos son puntuales y cuando han ocurrido, no se han diseminado fácilmente de persona a persona. Las personas con mayor riesgo de contagiarse son aquellas expuestas a aves infectadas (domésticas, silvestres o en cautiverio), como los tenedores de aves y el personal involucrado en el control de los brotes.
Actualmente, no hay evidencia de que el consumo de carne aviar o de huevos sea fuente de infección.
Ante la detección de aves con comportamiento anormal, por ejemplo los abajo listados:
·ya sea por signos clínicos respiratorios, digestivos, neurológicos;
·por disminución en la producción de huevos,
·alteración en su rutina de consumo de agua o alimento;
·presencia de aves domésticas o silvestres muertas o cualquier situación sanitaria fuera de lo común,
Se recomienda no tocar las aves y dar aviso inmediato al SENASA.















