Con la confirmación de que Ecuador será el rival en los cuartos de final de la Copa América, la Selección Argentina pone primera tras el domingo de descanso y arranca la semana preparando lo que será la cita del jueves en Houston. Todavía en Miami, donde por la tarde temprano el plantel se entrenará con un ojo en la evolución física de Lionel Messi, Lionel Scaloni de a poco intentará darle forma a un equipo que tiene algunas dudas puntuales.
La primera tiene que ver justamente con la situación del capitán: la Pulga padece una molestia muscular en el aductor y continuará realizando trabajos de kinesiología con el objetivo de poder llegar en plenitud. Si bien hay optimismo de que podrá decir presente, ya sea como titular o sumando unos minutos en el complemento, por ahora hay que mantener la cautela y ver cómo progresa en estos días previos al partido con la Tri.
En caso de que Messi esté en condiciones para jugar solo un rato, lo más probable es que Ángel Di María arranque como titular en su lugar; por lo pronto, en la mente del cuerpo técnico de la Selección Argentina ronda la idea de que no jueguen los dos juntos y que, en ese sentido, uno sea el reemplazante del otro.
Las otros interrogantes son un poco los que se vienen presentando a lo largo de esta Copa América en la cual la Scaloneta clasificó a cuartos con puntaje ideal. Con Rodrigo De Paul y Alexis Mac Allister como fijas, la cuestión pasa por definir al tercer mediocampista: Leandro Paredes o Enzo Fernández. Si juega el del Chelsea, el volante del Liverpool será el eje; en cambio, si lo hace el de la Roma, se moverá como interno.
A eso se le suma, ahora más que nunca, el dilema del entrenador sobre el 9. Es que el presente goleador de Lautaro Martínez (4 goles en tres partidos) pone en aprietos a Scaloni, quien deberá decidir si sigue priorizando a Julián Álvarez o le da la chance a un afilado Toro.